A Carmen Medel Palma, alcaldesa de Minatitlán, no le basta con perder una huelga de empleados municipales, dañar el erario, reprimir comerciantes, inundar de “aviadores” la nómina municipal y estar al servicio de los líderes petroleros de amplia trayectoria corrupta. Ahora quiere ser secretaria de Salud.

Ya olvidó cuando la hoy precandidata de Morena al gobierno de Veracruz, Norma Rocío Nahle García, la instó a dialogar y terminar con la huelga de empleados municipales, y Carmen Medel la desoyó.

Ya olvidó el coqueteo político con el diputado federal Sergio Gutiérrez Luna, enemigo natural de Rocío Nahle, que obligó a que el líder del Congreso, Juan Javier Gómez Cazarín, bajara a Minatitlán y le diera un apretón.

Ya olvidó su alianza con los líderes petroleros de la Sección 10, encabezados por el fallecido Jorge Wade González y su hijo Saúl, operando para Adán Augusto López Hernández, contrincante de Claudia Sheinbaum Pardo, con quien jugó sus cartas Rocío Nahle.

Carmen Medel se inscribió para contender por la candidatura de Morena a la senaduría por Veracruz, sin que nadie la haya tomado en cuenta y, en cambio, haya provocado una carcajada que se escuchó en todo Veracruz.

Y ahora anda pregonando que quiere ser secretaria de Salud en el gobierno de Nahle, siempre y cuando Rocío Nahle pueda ganar la elección.

No es que tenga aspiraciones; es que Carmen Medel es superlativamente ilusa.