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En la medida en que los gastos de operación de los programas emblemáticos del gobierno se reduzcan, mayor será el presupuesto que se destine a la población que lo necesita, porque con los recursos desmedidos sólo se abre un boquete para ocultar en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) un “cochinito para gastos oscuros”, afirmó el Grupo Parlamentario del PRI, que coordina el diputado Rubén Moreira Valdez, a través de un comunicado.

El diputado José Francisco Yunes Zorrilla, secretario de la Comisión de Hacienda, afirmó que hay un aumento desproporcionado en los montos de gastos de operación en algunos programas sociales, lo que se vuelve sospechoso porque puede utilizarse para fines distintos, inclusive electoreros.

Consideró necesario generar candados desde la discusión del PEF 2022, tras señalar que, particularmente, el Programa Social de Pensiones para Adultos Mayores, de 2018 a 2020, incrementó seis veces el tamaño de sus recursos.


 

En tres años, indicó el legislador, la partida para este programa pasó de 40 mil millones de pesos (mdp) a 200 mil mdp. Precisó que se pretenden destinar 8 mil 500 millones de pesos a gastos de operación de los 240 mil millones de pesos utilizados para las pensiones de adultos mayores, lo que es demasiado para propósitos administrativos, y propuso que mejor se asigne mayor cantidad de recursos para beneficiarios a más mexicanos.

Por su parte, la diputada Blanca Alcalá Ruiz hizo notar que la operación de los programas sociales supera por mucho al crecimiento de la inflación, lo cual se convierte en un despropósito. Mencionó que en la mayoría de los programas la dispersión de los fondos es a través de “transferencias electrónicas”, directamente desde la Tesorería de la Federación, lo que ha permitido reducir sensiblemente los costos de operación de cada uno de los programas sociales.

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