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El Universal

En la Mansión Willbraham, ubicada en la opulenta zona de Belgravia, Karime Macías es la vecina ideal.
Fuentes consultadas por EL UNIVERSAL, y que pidieron no ser mencionadas, la describen como “una persona gentil, amable, siempre sonriente”.


 “No es una persona con la que se pueda hacer plática, pero es agradable, claro hasta dónde uno puede percibir”, señaló un vecino que la identificó tras mostrarle una serie de impresiones fotográficas.
Entre los vecinos de Macías hay personas dedicadas a la venta de oro, minería, petroleros, así como herederos de fortunas acumuladas.
Igualmente la consideran como una mujer elegante, distinguida por su ropa de marca y lucir siempre un corte de pelo impecable.
“Le gusta cambiar de color de cabello, pero siempre usando tonos castaños”.
Otro testimonio aseguró que al menos vive en el inmueble desde hace un año, no tiene auto, todo hace caminando.
“Nunca he visto que tome taxi, todo hace caminando, con horarios muy regulares. A las 8 de la mañana lleva los niños a la escuela, y como a las 5 de la tarde va por ellos”.
Vecinos de la calle Wilbraham dicen que sólo hay que asomarse a uno de los aparadores de los comercios para darse cuenta de la opulencia en la zona.
De acuerdo con el Gobernador de Veracruz, Miguel Angel Yunes, los hijos de Macías y el ex gobernador de Veracruz Javier Duarte, acuden al colegio privado Eaton Square School, en donde las colegiaturas pueden ascender hasta casi 22 mil libras al año.
Entre los vecinos de Macías hay personas dedicadas al oro, la venta petrolera y la minería, así como herederos de fortunas acumuladas por generaciones. Hay ingleses, españoles, rusos y árabes; la mayoría supera los 50 años de edad. Al parecer sólo hay otra familia con niños en el domicilio.
La renta de los elegantes y amplios departamentos de la calle Willbraham se estiman entre 3 mil y 3mil 500 libras a la semana.
Luego de que varios aseguraron que vivía en el departamento número 8, éste diario procedió a tocar el timbre.
Al preguntar: “¿Está Karime Macías?”, el interfón rompió abruptamente la comunicación.
Posteriormente una mujer salió negando que allí viviera y pidiendo identificar a aquellos vecinos que decían lo contrario.
“¿Tiene conocimiento la policía de esto?, ¡No lo puedo creer! ¡La corrupción está en todos lados!” fueron algunas de las reacciones de las personas consultadas y luego de conversar con el periodista.

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