Ciudad de Méxicio.- Ricardo Monreal Ávila, líder de los diputados de Morena, ha señalado que la reforma electoral presentada por Claudia Sheinbaum es negociable, destacando que el Congreso será el encargado de definir sus términos finales, con miras a evitar polarización y legitimar el proceso democrático.
Ricardo Monreal Ávila, coordinador de los diputados de Morena, ha enviado un mensaje claro a la oposición y diversos actores políticos respecto a la reforma electoral impulsada por Claudia Sheinbaum: el proyecto no está escrito en piedra. Con este gesto, Monreal busca establecer un diálogo abierto que permita debatir los términos de la reforma en el Congreso, subrayando que, aunque la iniciativa provenga del Ejecutivo, no es definitiva ni indiscutible.
Reconociendo la necesidad de revisar cada uno de los puntos que componen la propuesta, el legislador zacatecano enfatizó que el principal objetivo es evitar divisiones innecesarias y construir un pacto inclusivo que ofrezca estabilidad y validez al futuro marco electoral del país. “Es crucial que el Congreso tenga la última palabra, asegurando que cualquier modificación sea resultado de un amplio consenso político”, afirmó Monreal.
Esta apertura al diálogo pone en relieve un intento por conectar con partidos de oposición como el PAN y el PRI, quienes han expresado su reticencia a involucrarse en los foros de la Comisión Presidencial de Reforma Electoral. Monreal destacó que, pese a sus reservas, estas bancadas tendrán la oportunidad de expresar sus preocupaciones durante las discusiones legislativas formales.
La reforma electoral, una de las promesas significativas de la presidenta Sheinbaum, pretende abordar la reducción de legisladores plurinominales, disminuir el financiamiento público a partidos y reconfigurar el Instituto Nacional Electoral (INE). En palabras de Monreal, “un consenso fuerte es imperativo para el éxito de cualquier reforma electoral, incluso si esto implica ajustar la propuesta original para incorporar diferentes perspectivas”.
