
Coatzacoalcos, Ver.- La gira de Rocío Nahle en Coatzacoalcos no fue un día de campo. Tres reclamos, uno por la masacre ocurrida en un taller mecánico, alteraron el guión de su discurso cargado de promesas y buenos deseos.
Muy temprano, jóvenes que cursan sus estudios universitarios en el Instituto Tecnológico Superior de Coatzacoalcos (Itesco) bloquearon uno de los accesos a la ciudad en protesta por las nuevas medidas adoptadas por la directora, Lorena Martínez Cabrera, a quien le exigen esclarecer el destino de los recursos provenientes del pago de inscripción, ya que no se refleja en la calidad del servicio que se les ofrece.
De igual forma, maestros pertenecientes a organizaciones sindicales protestaron por la reforma a la Ley del ISSSTE, que afecta sus derechos laborales.
Así mismo, Alfredo Herrera, padre de Carlos Herrera, quien murió en una masacre perpetrada por un comando armado, el 28 de febrero, en un taller mecánico, dialogó con la gobernadora de Veracruz y exigió que se le haga justicia.
Un padre exige justicia
“Me mataron a mi niño”, dijo Alfredo Herrera con la voz quebrada al dirigirse a Rocío Nahle, gobernadora de Veracruz, durante su visita a Coatzacoalcos este lunes. Su hijo, Carlos Herrera, de 22 años, fue asesinado el pasado 28 de febrero en un taller mecánico de la ciudad, y hasta el momento, su familia no ha recibido ninguna respuesta clara de la Fiscalía del estado.
El hombre aprovechó la presencia de la mandataria para pedirle justicia y denunciar públicamente que, además del crimen de su hijo, enfrenta trabas burocráticas que le han impedido sepultarlo.
“Todavía no lo he podido enterrar porque no me han entregado ni sus pertenencias ni los papeles necesarios. Llevo casi tres días con mi hijo en un ataúd en mi casa, y la fiscalía no nos ha dado ninguna respuesta”, lamentó.
Nahle, visiblemente incómoda por la escena, le prometió que el caso sería revisado y que su gobierno no permitiría que quedara impune.
Docentes protestan contra la reforma al ISSSTE
La gira de la gobernadora por el sur del estado también estuvo marcada por protestas. Desde la mañana del lunes, docentes afiliados a la Sección 32 del SNTE bloquearon avenidas y tomaron la Delegación Regional de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) en rechazo a la reforma a la Ley del ISSSTE impulsada por el gobierno federal.
El sector magisterial acusa que la iniciativa les arrebata derechos adquiridos, como la posibilidad de jubilarse después de 28 años de servicio en el caso de las mujeres y 30 en el de los hombres.
Una apuesta por el desarme en medio de la crisis de violencia
Mientras el malestar social se manifestaba en las calles, Nahle encabezó el evento Sí al Desarme, Sí a la Paz, una iniciativa del gobierno estatal para la entrega voluntaria de armas.
“Coatzacoalcos no es tierra de nadie. No vamos a permitir que la impunidad siga marcando el destino de esta ciudad y de nuestro estado”, declaró la gobernadora.
Según cifras oficiales, en los últimos dos meses se han entregado más de 10.000 cartuchos en el marco de este programa, con el objetivo de reducir los riesgos de violencia en los hogares veracruzanos.
El mensaje de Nahle llega en un momento en el que Coatzacoalcos sigue siendo uno de los municipios más violentos del estado, con hechos como el ataque al taller mecánico donde fue asesinado Carlos Herrera y que, hasta ahora, sigue sin esclarecerse.
“Vamos a recuperar Coatzacoalcos y todo Veracruz. Por cada delito, vamos a actuar; por cada delincuente, se hará justicia”, aseguró la mandataria.
Sin embargo, para los manifestantes y para personas como Alfredo Herrera, las promesas del gobierno siguen sonando lejanas.