“AL CARAJO” ENVÍA LÓPEZ OBRADOR A PETROLEROS QUE EXIGEN PLAZAS DEFINITIVAS EN PEMEX
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que en su gobierno hay disposición para atender demandas y llegar a acuerdos con los trabajadores de la Sección 35 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), que ayer bloquearon la avenida Marina y tomaron la Torre de Petróleos Mexicanos (Pemex), para exigir plazas y servicio de atención médica en la refinería de Tula, Hidalgo.
No obstante, el mandatario mandó “al carajo” los actos de presión para obtener privilegios de grupo o personales.
“Acabo de hacer una denuncia, porque cerraron una válvula y se está haciendo una investigación, quién quiere que haya un accidente. Que no estén pensando de qué va a haber impunidad, eso se terminó; y al mismo tiempo atender sus demandas justas de los trabajadores”, dijo.
Y advirtió:
“Pero no es: ‘A ver, yo tomo la Torre de Pemex porque a mí me tienen que dar los contratos o a mí me tienen que dar las plazas.’ Pues tómala, pero no te vamos a dar los contratos, no te vamos a dar las plazas si no tienes razón y si vas a dejar afuera a trabajadores que tienen antigüedad, pero no están cercanos a ti o no se mocharon. Eso ya se acabó, entonces nada más estar pendiente, atentos todos los ciudadanos para que eso ya no regrese”, indicó.
En la conferencia matutina, el presidente López Obrador aseguró que la expresión de “al carajo” no es una grosería, comentó que los marinos saben qué es el carajo y pidió revisar el concepto de esta palabra en un diccionario.
No obstante, en el Diccionario de la Lengua Española (DLE), la palabra carajo se define como una expresión “malsonante” y hace referencia al “miembro viril”.
“Dije la vez pasada que al carajo y piensan que es una grosería. Los marinos saben qué es el carajo, que se vayan al carajo, nada más que hay que buscarle en el diccionario. Pero, sí, al carajo con todo eso, en los términos que se usaba en la marinería”, sostuvo López Obrador.
Previamente, señaló que en el caso de la protesta de los trabajadores de Pemex, hay disposición para llegar a acuerdos.
“Sin embargo, ha habido cambios, por ejemplo, para la entrega de las plazas, que antes se manejaban de manera discrecional por parte de los líderes sindicales. Y no siempre se entregaban las plazas a quienes tenían más antigüedad como transitorios, se entregaban las plazas a los más cercanos o a los que tenían más influencia”, refirió el mandatario.
Por ello, señaló que esta práctica negativa se está corrigiendo en su gobierno y esta situación ha probado inconformidad entre los trabajadores que será atendida y explicada a los obreros.
“Y también hay los que siempre quieren llevar agua a su molino, líderes charros, que todavía hay, que sienten que están siendo desplazados y que ya no pueden seguir medrando y entonces azuzan”, sentenció el presidente Obrador.
“De todas maneras, hay que atenderlos, pero, como se dice coloquialmente, no irnos con la finta, porque había sindicatos poderosísimos y líderes sindicales que vivían rodeados de atenciones, de privilegios, líderes sindicales con mansiones, riquísimos”, insistió el tabasqueño.