Orizaba, Ver.- El alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Franco, calificó como “una estupidez” el proyecto federal liderado por Claudia Sheinbaum, que propone dos nuevas casetas en la autopista Córdoba–Orizaba, argumentando que no beneficiarán económicamente a la región y afectarán la movilidad.
Expresó un fuerte rechazo al reciente proyecto del gobierno federal que planea establecer nuevas casetas de cobro en los tramos de Balastrera y Amatlán de los Reyes y calificó el plan como “una estupidez”, argumentando que traerá más desventajas que beneficios para la región.
El plan, articulado bajo el nuevo programa de modernización carretera y ejecutado por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, en colaboración con la empresa colombiana Cal y Mayor, ha generado descontento entre los dirigentes locales. Según Diez Franco, el proyecto carece de justificación técnica y financiera, y advirtió que solo contribuirá a congestionamientos que podrían bloquear la autopista durante años.
Los transportistas de la región también han mostrado su preocupación ante la posibilidad de padecer pérdidas superiores a los 150 millones de pesos anuales. Los nuevos cobros incrementarían significativamente los tiempos de traslado y los costos logísticos para las empresas que operan en la zona centro de México, afectando la competitividad económica de áreas clave como Veracruz, Puebla y el Valle de México.
Las voces en contra de este proyecto no se limitan a las autoridades locales y transportistas; empresarios y organizaciones locales han exigido transparencia en el proceso. Han solicitado que se revelen los términos de la concesión y los contratos con Cal y Mayor antes de que avance cualquier construcción, destacando la necesidad de una revisión integral que considere los intereses de todos los afectados.
