Chilpancingo, Gro.- Manifestantes de la FECSM lanzaron bombas molotov y quemaron vehículos frente al Palacio de Justicia en Iguala, Guerrero, en protesta por la falta de justicia en el caso de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos hace 11 años.
Los manifestantes incendiaron camionetas y lanzaron bombas molotov en un acto de protesta que busca exigir la entrega de videos cruciales para esclarecer los eventos trágicos ocurridos el 26 y 27 de septiembre de 2014.
El ataque se produjo alrededor de las 16:00 horas, cuando un nutrido grupo de jóvenes descendió de una flota de 36 autobuses y rodeó el edificio. Con vehículos confiscados de una empresa repartidora de pan, intentaron derribar los portones del recinto, alentados por la desaparición de evidencias fundamentales en la investigación de uno de los casos más sonados en materia de derechos humanos en México.
La ausencia de fuerzas del orden permitió que los manifestantes actuaran sin restricciones. En cuestión de minutos, las llamas envolvieron los vehículos y el humo se elevó en densas columnas, mientras un grupo de encapuchados lanzaba piedras al convoy desde un puente cercano. La rabia de los estudiantes reflejó la frustración acumulada por años de impunidad y lentitud en la resolución del caso.
Este acto de vandalismo coincide con un mitin organizado por familiares de los desaparecidos, quienes han mantenido la exigencia de justicia viva durante más de una década. En sus declaraciones, Melitón Ortega, portavoz de las familias, describió la situación como un acto de “terrorismo” institucional y llamó a la presidenta Claudia Sheinbaum a reconocer los incidentes como manifestaciones legítimas de hartazgo ante la injusticia imperante.
