Ciudad de México.- Adán Augusto López, coordinador de Morena en el Senado, desmiente la existencia de acuerdos con grupos delictivos para asegurar su victoria en las elecciones estatales de 2018 en Tabasco, resalta su compromiso con la verdad y acusa a los conservadores de difundir mentiras con fines políticos.
Su reacción se dio luego que se difundiera parte del expediente integrado por la Fiscalía General de la República en la que un testigo protegido señala que el ex secretario de Seguridad Pública de Tabasco y líder de la organización criminal La Barredora, Hernán Bermúdez Requena, pactó como la delincuencia para lograr una elección pacífica que permitió al entonces candidato de Morena, Adán Augusto López Hernández, convertirse en gobernador.
Adán Augusto apuntó que mantiene un evidente compromiso con la verdad y la justicia, al manifestar su plena disposición a cooperar con las autoridades competentes si así lo requieren.
Pese a que el señalamiento proviene de un testigo protegido, López Hernández acusa a los sectores conservadores y a medios de comunicación de orquestar una campaña de desprestigio en su contra. Según sus palabras, estos sectores han recurrido a supuestos testigos, cuyas declaraciones no han sido citadas adecuadamente, y expedientes que tampoco se refieren con propiedad, para sostener una narrativa que, asegura, es infundada y carente de evidencia.
El líder morenista enfatizó que las elecciones de Tabasco no se caracterizan por la violencia ni la intervención del crimen organizado, asegurando que la seguridad del proceso electoral fue entonces responsabilidad del gobierno en turno. Remarcó que el secretario de Seguridad Pública, encargado de dicho proceso fue posteriormente ratificado al inicio de su gestión como gobernador, lo que, a su juicio, desmiente las acusaciones de irregularidades.
En sus declaraciones, López no escatimó en reproches hacia los medios de comunicación que, según él, actúan como propagandistas al servicio del conservadurismo. Acusó a estos medios de difundir falsedades con el objetivo de desprestigiar los logros alcanzados por su administración y el avance del movimiento de transformación en México. Concluyó afirmando la necesidad de combatir estas agendas desinformativas que afectan a la sociedad mexicana.
Pero el señalamiento de un pacto con el crimen organizado no lo hizo la prensa sino un testigo de la Fiscalía General de la República.