De manera por demás valiente, el dirigente emecista, Sergio Gil Rullán, acusa con índice flamígero a la gobernadora Rocío Nahle de imponer una nueva modalidad de fraude electoral, vía acoso a magistrados y complicidad y corrupción con el organismo electoral OPLE.
“Hoy ganan en tribunales lo que no alcanzaron obtener en las urnas”, dijo tras darse a conocer el despojo a las candidaturas ganadas por Movimiento Ciudadano en Papantla.
“Manosearon las urnas, alteraron las boletas y legitimaron votos desechados en su favor”, dijo.
Así nos arrebataron “a la mala” la victoria.
La gobernadora del Huachicol es la cabeza de toda esta trampa.
En tanto Nahle, como momia.