
Ciudad de México.- Miguel Ángel Yunes Márquez, exsenador del PAN ya es chairo. Figura clave en la aprobación de la reforma judicial impulsada por Morena, ha formalizado su adhesión al partido guinda. La afiliación se oficializó este 18 de febrero en el Senado, donde el político veracruzano agradeció a sus nuevos compañeros por la acogida en un momento que calificó de “crucial” para su trayectoria.
Su llegada a Morena no ha estado exenta de polémica. Apenas unos meses antes, Yunes Márquez aseguraba su lealtad al PAN, incluso tras haber emitido un voto a favor de la reforma judicial, en contra de la postura de su entonces partido. El movimiento fue interpretado por sus antiguos correligionarios como una traición negociada con el oficialismo.
Un viraje político marcado por controversias
Hijo del exgobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, el ahora morenista construyó su carrera dentro del PAN. Fue diputado local y coordinador de alcaldes en su estado natal antes de lanzarse a la política nacional. Sin embargo, su historial incluye un episodio judicial que puso en jaque su futuro político: en 2024, una jueza de control giró una orden de aprehensión en su contra por presunta falsificación de documentos en su intento por registrarse como candidato a la alcaldía de Veracruz.
El caso escaló rápidamente. Yunes Márquez obtuvo una suspensión provisional contra la orden de arresto y la emisión de una ficha roja por parte de Interpol, mientras se refugiaba en Estados Unidos. Pese a la incertidumbre legal, logró rendir protesta como senador el 29 de agosto de 2024, respaldado por un fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que desechó los intentos de Morena por impedir su llegada a la Cámara Alta.
Un voto clave en la reforma judicial
El 10 de septiembre de 2024, el Senado aprobó en lo general la reforma judicial impulsada por Morena. Entre los votos que inclinaron la balanza a favor del oficialismo destacó el de Yunes Márquez, todavía militante del PAN en ese momento. La reacción de su partido fue inmediata: el dirigente Marko Cortés lo acusó de haber pactado con Morena a cambio de impunidad.
“Estoy francamente decepcionado, porque esos opositores férreos, valientes, ahora los veo sometidos e hincados al poder”, expresó Cortés tras la votación.
Días después, el PAN confirmó la expulsión de Yunes Márquez, junto con su padre y su aliada política Natividad Díaz, diputada local en Oaxaca.
La acogida en Morena y el rechazo de Veracruz
El 18 de septiembre de 2024, apenas unos días después de su expulsión del PAN, Yunes Márquez se reunió con la entonces presidenta electa, Claudia Sheinbaum. La imagen del encuentro fue interpretada como la confirmación de su acercamiento a Morena.
El nombramiento de Yunes Márquez como presidente de la Comisión de Hacienda del Senado en febrero de 2025 terminó de sellar su integración al oficialismo. A pesar de no formar parte de ningún grupo parlamentario en ese momento, su posición estratégica en el Legislativo reforzó la percepción de que su llegada a Morena era cuestión de tiempo.
Finalmente, este 18 de febrero, el senador formalizó su afiliación. “He decidido apoyar a la presidenta Claudia Sheinbaum”, declaró, al tiempo que recibía el respaldo de figuras clave en el Senado.
Sin embargo, no todos en Morena ven con buenos ojos su llegada. La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, rechazó públicamente su incorporación, asegurando que Yunes Márquez “no representa ni cuenta con los postulados del movimiento de regeneración”. Desde su cuenta de X (antes Twitter), la mandataria anunció que pedirá formalmente a la dirigencia del partido que reconsidere la afiliación.
Con su cambio de bandera política, Yunes Márquez suma un nuevo capítulo a una carrera marcada por la polémica, en un movimiento que reconfigura las alianzas dentro del Senado y alimenta las tensiones al interior de Morena.