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Gerardo Fernández Noroña, quien debutó como presidente de la Mesa Directiva del Senado, dejó claro en su primer discurso que su gestión estará marcada por la voz del pueblo, alineada con los principios de la Cuarta Transformación.

En una sesión en la que se emitieron 127 votos a su favor, Fernández Noroña, exdiputado del PT ahora en Morena, tomó el micrófono y, entre vítores y aplausos, proclamó: “Hoy, hijas e hijos del pueblo somos senadores de la República. Esta revolución sin violencia, que es la Cuarta Transformación, ha permitido que un plebeyo como yo esté al frente de la Cámara de Senadores.”

En un claro reconocimiento al movimiento liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, Noroña reiteró su lealtad al proyecto de la 4T y extendió su respaldo a Claudia Sheinbaum, presidenta electa, destacando su confianza en la continuidad del proyecto para el próximo sexenio.

Fernández Noroña subrayó que su presidencia buscará la unidad en el Senado, pese a las diferencias políticas: “Que con esta unidad sirvamos a la patria más allá de nuestra diferencia de opiniones y proyectos”, expresó antes de entonar el himno nacional con la mano izquierda en alto.

La sexagésima sexta legislatura, bajo su presidencia, se perfila crucial para las reformas nacionales, entre ellas la polémica reforma al Poder Judicial y la desaparición de organismos autónomos, propuestas dentro del denominado ‘Plan C’ de AMLO, que generaron preocupación en diversos sectores y países aliados como EE. UU. y Canadá. Además, Claudia Sheinbaum también pondrá sobre la mesa dos reformas clave relacionadas con programas sociales.

Con una trayectoria de más de 15 años como legislador, Noroña no es nuevo en los reflectores. Reconocido por su frontalidad y su papel en la Cámara de Diputados, donde llegó a confrontar al exsecretario de Seguridad Genaro García Luna, ahora se posiciona como una de las figuras más fuertes de Morena en la Cámara Alta, junto con Adán Augusto López y Javier Corral.