Cuando Ismael “El Mayo” Zambada abordó el avión privado con sobrevolaría pistas clandestinas, no imaginó que terminaría en territorio norteamericano, apresado por el FBI y con la sospecha de que Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, lo habría entregado.

El capo de la droga mexicano Ismael “El Mayo” Zambada fue arrestado por agentes estadounidenses después de ser engañado para volar a Texas, según un reporte del The Wall Street Journal. Funcionarios mexicanos y estadounidenses informaron que Joaquín Guzmán López, hijo del encarcelado Joaquín “El Chapo” Guzmán, estaba en el mismo avión y también fue arrestado.

De acuerdo con el WSJ, Zambada creyó que iba a inspeccionar supuestas pistas clandestinas en México, pero en realidad fue llevado a Texas. Esta operación conjunta, llevada a cabo por la Oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional y el FBI, tomó varios meses de planificación.

La fiscalía estadounidense había acusado a Zambada en febrero de conspiración para fabricar y distribuir fentanilo, con el conocimiento de que sería importado ilegalmente a Estados Unidos. El Departamento de Justicia de Estados Unidos confirmó la detención de Zambada y Guzmán López en El Paso, Texas, en un comunicado emitido por el fiscal general Merrick Garland. Garland describió al Cártel de Sinaloa como “una de las organizaciones de narcotráfico más violentas y poderosas del mundo”.

Ambos capos enfrentan múltiples cargos en Estados Unidos por dirigir las operaciones delictivas del cártel, incluidas sus mortíferas redes de fabricación y tráfico de fentanilo.