Tal como estaba previsto la corcholata Claudia Sheimbaun cerró su precampaña en Xalapa con un gasto millonario a cargo del gobierno del estado que oscila entre los 18 y 20 millones de pesos.
Tal como los propios organizadores encabezados por la desatinada ex panista y priista, hoy Morena, Consuelo Thomas, conocida en el bajo mundo de la política como “Chelo”, se movilización 600 autobuses con un costo de 3.6 millones de pesos.
Para el acarreo, desde Oaxaca, Tabasco y la ciudad de México, se dispusieron de 5 millones de pesos por el pago de 200 pesos por asistente.

Mientras para la movilización en el Velódromo de Xalapa, organización interna, la participación obligada de la burocracia, los 400 policías y guardias nacionales para resguardar el éxito del cierre, así como la propaganda, playeras, camisas, gorras y lonches -que si los hubo- se erogaron casi 8 millones de pesos.

Desde luego que el gasto calculado por los propios organizadores, incluyó la promoción en redes sociales, el retoque de bardas y la propaganda de mano.

Fue un total descaro la participación gubernamental en la organización del evento en donde de manera embozada el liderazgo del evento estuvo a cargo del primo hermano del gobernador, Eleazar Guerrero.

El primer nivel del gobierno, empezando por Cuitláhuac García no asistió, pero ello no quiso decir que no participara en la organización y movilización en donde parte de la misma se la llevó el diputado Juan Javier Gómez Cazarín.

El evento, reseñan las crónicas, fue muy vistoso, muy al estilo priista, con porras, vivas y selfies, no exento de agresiones como la sufrida para no variar, contra una periodista.

En un ataque por realizar su labor informativa la periodista Verónica Rocío Huerta Aburto fue agredida por un grupo de cinco o seis mujeres simpatizantes, organizadoras y empleadas del ayuntamiento de Miahuatlán.

En medio de los ataques, Verónica pidió ayuda a seis agentes de la Dirección de Tránsito estatal que estaban presentes como testigos, pero no recibió respuesta, solo se burlaron de ella.

También solicitó auxilio de la Guardia Nacional, aunque ninguna autoridad presente en el lugar respondió a su llamado.

El evento empezó cuatro horas después, mucha gente abandonó el lugar, pero todo se difuminó cuando Claudia Sheimbaun hizo su triunfal aparición en el escenario organizado “por voluntad propia” por las mujeres veracruzanas quienes ataviadas con trajes regionales dieron el espectáculo para que la preferida de López Obrador quedara halagada.

“Es tiempo de mujeres”, dijo Claudia luego de criticar al Frente Amplio por México “por representar al pasado”.

¿Representar al pasado? ¿Y el descarado acarreo? ¿Y la injerencia gubernamental? ¿Y el dinero público gastado? ¿Y toda la millonaria propaganda?

Esos 72 días de Claudia y el resto de las corcholatas significó para el erario un gasto extraordinario ya que el cálculo, tan solo en espectaculares osciló entre los 25 y 30 millones de pesos por aspirante, sin incluir la pinta de bardas que en el caso de Veracruz llevan mas de dos años ocupando espacios públicos y privados.

Y si a cada aspirante le dieron 5 millones de pesos para sus precampañas ¿por qué entonces las cuentas no cuadran?

El próximo 6 de septiembre se dará a conocer el nombre de la candidata presidencial de Morena. Ellos la llaman “Coordinadora de los Comités para la Defensa de la 4Transformación”

¡Vaya genialidad!

Es es, ni más ni menos, el Movimiento de Regeneración Nacional, Morena.

Tiempo al tiempo.

*Premio Nacional de Periodismo