Share

“Amar es encontrar en la felicidad de otro la propia felicidad de amar.” – Giovanni Papini.

 

Aun cuando todo el escenario global en materia económica pareciera que pinta para que le vaya mal a Veracruz en 2017, en realidad pudiera ser todo lo contrario.


 

Las verdaderas oportunidades se dan cuando ante un problema inminente se ejerce un análisis serio, responsable, con amplio conocimiento del tema, pero, sobre todo, cuando se tiene un compromiso real para quienes se gobierna de responder y respaldar su decisión soberana.

De ese modo, la encrucijada global que aparentemente provocaría la crisis financiera originada por el manejo discrecional del recurso público del prófugo Javier Duarte y sus red de criminales de cuello blanco, son la circunstancia perfecta para el replanteamiento de una política económica y de recaudación no solo de Veracruz, sino de todas las entidades federativas, pues exhibe a todas luces una política de estado inequitativa para quienes conforman el pacto federal, que ofende, que raya en la falta de respeto a la soberanía de las entidades pertenecientes al mismo.

Si lo que apuntan algunos expertos resulta cierto, las primeras preguntas que deben responder los defensores del Pacto de Coordinación Fiscal, es aclarar y transparentar puntualmente cuales son los montos de recaudación y de aportación de cada entidad federativa al Pacto, pues pareciera que la propia Secretaría de Hacienda y Crédito Público, mantiene ese juego macabro de querer venderles a los estados que reclaman ayuda extraordinaria su deslealtad como si la federación por si sola fuera el origen del pacto, cuando no es así.

El pacto de coordinación fiscal debe por ende actuar en reciprocidad para quienes son los verdaderos garantes de esa unidad, y no a los designios de una camarilla, que ahora pretende erigirse en algo semejante a una deidad que con benevolencia o ira reprende o salva a sus protegidos.

El pleito por la sucesión presidencial y por ende la intensión de mantener el control hegemónico del mayor número de estados, está provocando que un asunto entre particulares -intereses políticos- se lleven entre las patas a 8 millones de ciudadanos que ven como su estado se colapsa por la complacencia inexplicable de la federación.

La actitud criminal que hoy pretende reprender a Veracruz por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y su titular José Antonio Meade sobre su crisis financiera, bien podría tipificarse como un desorden ominoso con tintes político partidistas en donde lo permisible, y la omisión, son los elementos de la ecuación que el gobierno federal no quiere reconocer.

Pero ante ello, la respuesta del Gobierno de Veracruz deberá ser, buscar con talento, capacidad y voluntad otras vías, que le conduzcan a mejores derroteros, por ello, es ahora cuando los empresarios deberán estar atentos, a invertir correctamente, y al estado a impulsar inversiones que detonen el desarrollo de la entidad.

De ese modo, ejemplos como el de Baja California deberían ser tomados en consideración, pues se perfila como la entidad federativa con el sector industrial más dinámico de México, al reportar una tasa de crecimiento de 10.2%.

Así lo deja ver la inflación disponible sobre el Producto Interno Bruto (PIB) por entidad federativa, con corte a 2015, publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Así es como debemos recordar que el sector secundario de la economía mexicana —que incluye minería, manufactura, generación de electricidad, gas y agua, así como construcción— creció 1% el año pasado.

Sin embargo, la desagregación de cifras por entidad federativa muestra que Baja California tuvo el desempeño más favorable, con 10.2%, seguido de los estados de la región Bajío. Guanajuato tuvo una variación positiva de 9.2% y Querétaro mostró un avance de 9.7%.

A este universo de entidades se suma favorablemente Tlaxcala, con un repunte de 8.8%.

En tanto, las entidades federativas que tradicionalmente se han concentrado en actividades industriales, como Jalisco y Nuevo León, reportaron en 2015 tasas de crecimiento de 6.8% y 5.4%.

Importante es destacar que la actividad industrial tuvo un desempeño negativo en entidades federativas más rezagadas en su desarrollo económico y humano, como Chiapas y Guerrero, que reportaron caídas de 12.1% y 11.1%.

Los datos anteriores son un reflejo de las disparidades económicas de las regiones de México, ya que las entidades con mayor crecimiento industrial son las que cuentan con una actividad manufacturera más desarrollada, refiere el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) en su reporte sobre competitividad estatal al año 2016.

En el crecimiento industrial también influye la vinculación con el comercio exterior, la construcción de infraestructura para el movimiento de mercancías, así como la disponibilidad de energéticos suficientes para impulsar las actividades económicas.

Y ahí es cuando nos cuestionamos, porque en Veracruz, no concentramos esfuerzos para buscar detonar este tipo de industrias, sabedores de que empresas importantes del ramo energético y del gas intentan desarrollar proyectos que eleven el desarrollo regional de diversas zonas, instalándose en diversas áreas, sin que hasta hoy las autoridades municipales o estatales otorguen ese aval que de curso a la consolidación de esos proyectos.

Aún más cuando se observa que entidades en donde por ejemplo el gas natural como industria brinda servicio a la misma concentra el 56% de las exportaciones totales del país, como sucede con cinco estados —Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas— permitiendo la generación de empleo, elevando la industria en muchos rubros, tanto en el sector secundario como en el terciario.

Así estados que cuentan con gasoductos —típicamente los de la región norte y el Bajío— reportan una actividad manufacturera equivalente a 23% del PIB estatal, en tanto que los estados sin gasoductos —básicamente los del sur— arrojan una participación manufacturera de 10% promedio en la economía estatal.

Recientemente el periódico el Financiero publicó un trabajo de Sergio Meana el cual refería que el precio de gas LP -usado en el 70 por ciento de los hogares del país-, será liberalizado a partir del próximo año, lo que implica que su valor estará sujeto a estacionalidades, además de que a partir de 2017 se reconocerán los costos de logística y transporte del combustible, lo que generará variaciones mensuales y hasta semanales en sus costos.

Según prevé el presidente de la Asociación Mexicana de Empresas Distribuidoras de Gas LP y Empresas Conexas (Amexgas), Octavio Pérez Salazar es posible que en la temporada invernal suban los precios, mientras que en verano el valor del energético podría bajar, además de que se comenzarán a considerar costos logísticos y de transporte.

“Estamos en un escenario de precios liberados y hay curvas. En invierno es más caro y en verano es más barato. Habrá empresarios que busquen los precios más baratos del mercado, habrá otros que cobren un extra por un producto de mayor calidad”, indicó.

Si bien en el caso de las gasolinas se espera que haya movimientos diarios del precio, en el caso del gas LP podrían ser semanales o mensuales.

Debido a que los precios podrán variar mensual y hasta semanalmente, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) creará una página que se alimentará de los precios de todas las empresas distribuidoras, para que los consumidores puedan identificar cuál será el valor del energético.

Otra respuesta la tendrá la Profeco, que publicará en conjunto con los empresarios distribuidores de gas LP el decálogo de los derechos del consumidor el martes 13 de diciembre, que entre otros, incluyen que los camiones publiquen el precio.

Pero todo esto podría mejorar a favor de usuarios e industria si se detonan los proyectos para la implementación y uso de gas natural para industria y hogares, como sucede en todas las regiones desarrolladas del mundo.

Esperemos que el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares destrabe los obstáculos que autoridades municipales imponen en un afán por hacer solo negocio a costilla de los empresarios que buscan el desarrollo de Veracruz.

 

Sextante

Con motivo de las fiestas decembrinas y de fin de año ésta columna periodística dejará de publicarse. Agradezco amable lectora y lector su preferencia a los comentarios y opiniones que a lo largo del año me permitió presentarle, hago votos para que, en amor, fraternidad, unidad, transitemos hacia un mejor 2017. Regresaremos con ahínco a partir del 9 de enero del 2017. Reitero mi gratitud por la atención que le brindaron a mis entregas en este inédito 2016.

 

Al tiempo.

 

[email protected]

Twitter: @LuisBaqueiro_mx

more related posts