(Con información de Brenda Terreros, de Infobae)

Samuel García anunció su retorno a sus funciones como gobernador de Nuevo León, confirmando así su renuncia a competir por la presidencia en las elecciones de 2024 como candidato de Movimiento Ciudadano (MC). La decisión de García de retomar el control del poder ejecutivo de Nuevo León surgió debido a la inconformidad con la elección de un gobernador interino por parte del Congreso local.

El gobernador interino designado, Luis Enrique Orozco Suárez, generó descontento entre García y la militancia de MC, quienes argumentaron que esta elección buscaba el control por parte del Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), ya que el perfil seleccionado no se alineaba con el proyecto del Movimiento Naranja.

El exdiputado federal, Fernando Belaunzarán, interpreta la renuncia de García como un intento de restar votos a Xóchitl Gálvez, precandidata de la coalición Fuerza y Corazón por México. Según Belaunzarán, al no estar dispuesto a ceder el control de Nuevo León, García demostró que su prioridad no era la presidencia.

Belaunzarán sostiene que la decisión de García representa un revés para el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). En sus palabras, “@samuel_garcias aventó la candidatura porque no quiso soltar el gobierno de Nuevo León ni un día. Se confirmó que no competía para ganar, sino para restar votos a @XochitlGalvez. Urge té de tila en Palacio Nacional.”

El Congreso de Nuevo León advierte que el regreso de Samuel García como gobernador es ilegal, ya que su licencia aún está vigente. A pesar de esta advertencia, García publicó un acuerdo en el que informa su regreso a las funciones de gobernador y su decisión de no participar en el proceso electoral federal 2023-2024.

El legislador Jorge Álvarez Máynez, coordinador de precampaña de García, respaldó la decisión, señalando que al retomar sus funciones, García se compromete a “garantizar la estabilidad política del estado y a no permitir que el PRI y el PAN se adueñaran de un gobierno que no ganaron en las urnas.”

En la carrera presidencial, Claudia Sheinbaum, precandidata de Morena, y Xóchitl Gálvez, precandidata de la coalición formada por PRI, PAN y PRD, continúan como contendientes. Las encuestas sugieren que Sheinbaum es la favorita para asumir la presidencia después del mandato de López Obrador.